Malla Avícola-Porcina

DISPOSICIÓN DE LOS GALLINEROS
Un corral bien dispuesto debe recibir con facilidad los primeros rayos del sol saliente, de modo que puedan calentar a los animales en las madrugadas de invierno. Para el descanso de las aves se ponen unos listones anchos llamados dormideros con los bordes redondeados y sin raja alguna. Deben estar todos a la misma altura, horizontalmente, de un costado a otro del gallinero, y deben ser móviles para limpiarlos de la gallinaza (excremento de gallinas ponedoras que se acumula durante la etapa de producción de huevo o durante su periodo de desarrollo, mezclado con desperdicios de alimento y plumas) con la debida comodidad. No conviene colocar dormideros escalonados.
En cualquier rincón opuesto a los dormideros, debe arrojarse un montón de paja que se repondrá siempre que se haga limpieza. Los ponederos se fijan en el otro rincón libre, normalmente a modo de cestas de forma elíptica, implantados en un travesaño de madera que se clava al muro con clavos sin cortes ni ángulos con los que se puedan herir las gallinas.
Los bebederos y comederos deben estar bien dispuestos para el aprovechamiento y comodidad de las aves. No debe arrojarse la comida al suelo, donde se mezcla con tierra, y conviene que los cacharros del agua estén cubiertos para que no la ensucie el polvo. Todos los utensilios deben tener bordes redondeados para no lastimar a las aves.